Una de las herramientas más importantes en el marketing digital es el contenido. A través de este, los usuarios pueden acercarse más a nuestra marca, así como interactuar con ella. El contenido visual es el que más destaca en las páginas web y las redes sociales. Por ello, es importante cuidar su elaboración al máximo.
Como creador de contenido uno siempre se pregunta si es necesario invertir en una cámara costosa o si la del móvil es suficiente. Es cierto que una cámara profesional le añade mayor calidad a la imagen, sin embargo, son elementos pesados que, además, requieren objetivos externos. Por otro lado, la industria de los smartphones está creciendo cada vez más, presentando dispositivos con hasta 4 cámaras digitales. La elección dependerá del tipo de contenido que deseamos capturar.
Cámaras DSLR: calidad en cualquier situación
Al contar con un sensor más grande, las cámaras réflex digitales permiten capturar más luz y, por lo tanto, más nitidez, reduciendo así el ruido de la imagen. Éstas funcionan excepcionalmente bien en ambientes poco luminosos, muy amplios o lejanos donde queremos conseguir más detalle.
Por otra parte, la gran ventaja de estas cámaras es que podemos capturar imágenes en formato RAW –algo que no todos los móviles son capaces de hacer. ¿Y qué significa esto? En el momento de la edición, tendremos material “crudo” que podemos modificar como queramos, sin perder calidad. Los softwares profesionales de edición fotográfica más populares son Photoshop y Lightroom, que también cuentan con su versión para Android e IOS.
Smartphone: comodidad y sencillez
En los últimos años y gracias a los avances tecnológicos, las cámaras de teléfonos inteligentes han mejorado significativamente, consiguiendo emular una calidad similar a la profesional.
Por lo general no requieren de una tarjeta de memoria externa, ya que los archivos se pueden almacenar en el mismo dispositivo o subir a la nube. Asimismo, la imagen está lista para publicar en redes sociales de manera inmediata, sin necesidad de enviarlo de un dispositivo a otro. Ambos factores permiten practicidad y flexibilidad a la hora de compartir imágenes.
Cámaras compactas o mirrorless: una alternativa a medio camino
En los últimos años, los youtubers o videobloggers han popularizado el uso de cámaras compactas como la Canon G7X o la Sony RX100. Estos dispositivos cuentan con un diseño pequeño, ideal para llevar a cualquier lado. De igual manera, permiten capturar imágenes y vídeos en calidad profesional.
Si queremos ir un poco más allá, las mirrorless son ideales. Estas no cuentan con el complejo sistema de espejos de las DSLR, siendo más ligeras y portables, pero logran una calidad semejante. Con lentes intercambiables, combinan lo mejor de las cámaras compactas y las réflex.
Una fotografía, mil historias
La fotografía tiene la capacidad de generar un efecto único en las personas, logrando presentar la verdadera esencia de una marca. Sin embargo, la resolución de una imagen no es lo único que define a un contenido de calidad. Si bien es un aspecto favorecedor, aquello que logre trasmitir nuestro mensaje será, sin duda, el contenido de mayor calidad para nuestro negocio. Es importante, entonces, conocer diferentes tipos de cámaras y aprender a utilizar la que mejor se adapte a nuestras necesidades.
Una cámara réflex es ideal para lograr una foto más real y poder jugar con la edición. Por lo contrario, si buscamos conveniencia y procesos automáticos, un smartphone será la mejor opción.